Si es que… La reciente regenerada playa de Tauro ya sufre las primeras consecuencias de haber quitado la barrera natural que suponían los callaos. Las viviendas que todavía siguen en la zona han quedado esta semana anegadas de agua y lodo, debido a la primera marea alta después de la terminación de la obra. ¿Qué pasará cuándo lleguen las grandes mareas? ¡Toletes!
Tras invertir 6 millones de euros y depositar más de 70.000 toneladas de arena. La playa resultante tiene una longitud cercana a los 300 metros y una anchura de otros 50 metros, que casi duplica las medidas anteriores de la playa, pero ¿y alguna barrera natural para evitar que el agua llegue a las casas que antes estaban protegidas por los callaos? ¡Pues no!
Después de este suceso, la empresa constructora ha realizado una barricada que alcanzó los dos metros de alto y otros 20 de ancho. Seguro que es suficiente…